Introducción

Si eres un fan de los macarrones con queso, entonces este artículo es para ti. Hoy te mostraremos cómo hacer macarrones con queso como nunca los has probado antes.

Ingredientes

• 1 paquete de macarrones
• 4 tazas de leche
• ½ taza de harina
• ½ taza de mantequilla
• 2 tazas de queso cheddar rallado
• 1 taza de queso parmesano rallado
• 1 cucharadita de sal
• ½ cucharadita de pimienta negra
• ¼ cucharadita de nuez moscada molida

Paso a paso

Paso 1: Cocina los macarrones

Cocina los macarrones según las instrucciones del paquete hasta que estén al dente. Es importante no cocinarlos demasiado porque aún serán horneados más tarde. Si los cocinas demasiado, se volverán blandos y empapados.

Paso 2: Haz la salsa de queso

En una olla grande, derrite la mantequilla a fuego medio. Agrega la harina y revuelve hasta obtener una pasta suave. Continúa revolviendo durante unos minutos para cocinar la harina. Agrega la leche poco a poco, revolviendo constantemente para evitar que se formen grumos.

Cuando toda la leche esté incorporada, agrega la sal, la pimienta negra y la nuez moscada. Cocina la salsa durante unos minutos mientras revuelves constantemente, hasta que espese y cubra el dorso de una cuchara de madera.

Agrega el queso cheddar rallado y el queso parmesano rallado a la salsa y revuelve hasta que se derrita y se mezcle completamente. Retira la salsa del fuego.

Paso 3: Mezcla los macarrones con la salsa de queso

Mezcla los macarrones cocidos con la salsa de queso hasta que estén completamente cubiertos. Vierte la mezcla en una fuente para horno de tamaño mediano.

Paso 4: Cocina los macarrones con queso

Coloca la fuente en el horno precalentado a 180°C durante unos 20-25 minutos o hasta que el queso se derrita y la parte superior esté dorada y crujiente. Retira los macarrones con queso del horno y sírvelos calientes.

Conclusión

¡Y ahí lo tienes! Ahora sabes cómo hacer macarrones con queso como nunca los has probado antes. No temas experimentar con diferentes tipos de queso o agregar otros ingredientes como tocino o salchichas para crear tus propias variaciones únicas de esta receta clásica.